Chuchi Maestegui es fundador de la reconocida prueba deportiva de los 10.000 del Soplao. Además, es miembro de la Junta Directiva del Grupo de Acción Local Saja Nansa y uno de los principales defensores de la idea de comarca. En esta entrevista hablamos con él sobre el potencial que tiene Saja Nansa en torno al mundo de los eventos deportivos, dado que varios de los que se desarrollan en el territorio están adquiriendo un gran reconocimiento a nivel nacional e incluso internacional.
A pesar de lo conocida que ya es la competición de los 10.000 del Soplao, para alguien que no lo conozca, ¿cómo lo definirías en pocas palabras?
Pues desde el punto de vista de trayectoria, es una competición deportiva que nació como una carrera de BTT en 2007, pero que ha ido creciendo hasta convertirse en una competición deportiva capaz de implicar a mucha gente de fuera y de dentro del territorio. Y, como me dijo un participante hace tiempo: “los 10.000 del Soplao es el tour de los populares” y es verdad, porque cada persona tiene su reto, gracias a la infinidad de disciplinas que se han ido añadiendo y a que hacemos sentir protagonistas a todos los que participan, independientemente de la posición en la que queden.
¿Qué crees que hace que los 10.000 del Soplao tenga tanto éxito?
En España hay otras competiciones de bicicleta similares, como Monegros o Quebrantahuesos, pero los 10.000 del Soplao son diferentes, por muchas características que reunimos y que hay en otros lugares. Quizá estas cualidades especiales se podrían agrupar en cuatro.
Para empezar, el entorno privilegiado en que se desarrolla y la hospitalidad de la gente de esta tierra. Aquí todo el mundo es consciente de las muchísimas personas que vienen aquí a vivir su sueño y se vuelcan con ellos. La buena acogida de los residentes y el buen ambiente que se respira es uno de nuestros grandes activos.
Por otro lado, como hemos dicho, todo el que quiere apuntarse encuentra su prueba. Año tras año hemos añadido modalidades que no existían para abarcar el máximo posible de disciplinas y ser más inclusivos.
Otro aspecto importantísimo es la implicación del voluntariado, que siempre ha sido espectacular y es lo que hace posible este reto.
Por último, la capacidad que tiene los 10.000 del Soplao de permitirnos vivir y compartir historias muy personales con los participantes y sus familias. Después de tantos años no dejan de sorprendernos y conmovernos. Saber y conocer por qué muchos de esos deportistas vienen hasta aquí es, sin duda, lo más emocionante que nos puede pasar como organizadores.
¿Qué te impulso a crear ese evento y hasta donde te gustaría llevarlo?
En el año 2005 hice la Quebrantahuesos, una prueba durísima en la que lo pasé muy mal, pero que al acabar me di cuenta de lo mucho que valía la pena. Fue un reto deportivo muy duro para mí y lo sufrí, pero también lo disfruté. Por eso quería traer algo así a Cabezón de la Sal y al Saja Nansa. Estaba convencido de que podía organizar algo aún mejor, un evento deportivo que ya nació con la ambición de juntar a 10.000 participantes, (de ahí su nombre), pero que también quería que creciese para abarcar más que la BTT.
Tardamos dos años en preparar los recorridos y arrancar la primera edición en la que, obviamente, no tuvimos tantos inscritos, pero que marcó un rumbo para el proyecto. Y lo cierto es que el éxito nos llegó de la mano de mucho esfuerzo y de un poco de suerte, porque en esa primera edición hizo un tiempo horrible y hubo competidores que lo pasaron francamente mal. Sin embargo, se empezó a correr la voz de la dureza de la prueba como un auténtico reclamo bajo el nombre del “infierno cántabro”, y ahí es cuando todo despegó.
Después de dos años de parón por la Covid, en 2022 hemos vuelto con toda la ilusión de recuperar las cifras de los años prepandemia y sé el año que viene y los siguientes serán clave para conseguirlo. Durante este tiempo hay personas que han perdido el hábito de hacer deporte, de entrenar duro, y ahora toca recuperarlos para que vuelvan a los 10.000 del Soplao en 2023.
En Saja Nansa se desarrollan también otras competiciones como El Desafío Cántabro o el Descenso del Deva y contamos con un equipo, el Club de Voley Textil Santanderina, que está en la Superliga ¿Qué crees que aportan los eventos deportivos a una comarca como Saja Nansa?
La comarca es una zona muy activa en temas deportivos. Aquí mucha gente practica deporte y hay varias competiciones que son realmente importantes a lo largo del año. Lo que ocurre es que es necesario que se reconozca más la labor de los organizadores de estos eventos, por toda la ilusión y trabajo que hay detrás. De hecho, se podrían generar nuevos hitos deportivos, pero se necesitan apoyos porque sacarlos adelante requiere mucho esfuerzo.
Por otro lado, es obvio que estas pruebas son muy positivas para el territorio, porque lo dinamizan y generan interés por el mismo, no solo mientras se desarrolla el evento, sino también antes y después. Muchas personas que han venido a competir han venido previamente a entrenar y luego regresan para visitar un poco más la zona. Conozco a más de uno que viene a pasar sus vacaciones aquí gracias a los 10.000 del Soplao. Esto favorece al sector turístico, comercial, etc.
Además, durante la competición se crea un vínculo muy especial entre organizadores, colaboradores y participantes.
¿Cómo ves actualmente el proyecto de comarca?
El proyecto comarca es imprescindible para afrontar los retos que tienen por delante nuestros municipios. En la unidad está la clave para superar determinados problemas, porque si colaboramos tendremos más posibilidades de afrontarlos.
Por ejemplo, en el caso de los eventos deportivos que se desarrollan en el Saja Nansa todos nos conocemos, pero, seguramente, si estrechamos lazos encontremos cosas que compartir. No cabe duda de que sería muy positivo poner en común nuestras experiencias para afrontar problemas que probablemente son comunes como la organización, la financiación, etc.
Tú que formas parte del Grupo de Acción Local, ¿cómo explicarías su labor en el territorio? ¿por qué crees que es importante ser parte activa de una entidad así?
El Grupo desarrolla una labor fundamental para trabajar esta idea de comarca que tanto nos conviene. Definitivamente, sin el Grupo lo tenemos complicado, porque de manera aislada está claro que hay retos que no se pueden acometer. El Grupo nos aporta la capacidad de enfrentarnos a los problemas unidos, de encontrar mejores soluciones. Formo parte del Grupo hace años y creo firmemente en el trabajo que se desarrolla desde allí, un trabajo que debería conocerse y valorarse cada vez más y mejor.